Los autobuses eléctricos ofrecen una solución para mejorar la eficiencia del transporte público urbano, uno de los factores relevantes para que México alcance los Objetivos de Desarrollo Sustentable de la ONU.
De acuerdo con la UNAM, “el transporte público es fundamental para reducir la huella de carbono de un país”[1]gracias a su eficiencia en la movilización de pasajeros y su bajo consumo energético proporcional, de la mano de mejoras tecnológicas.
Para Roberto Gottfried, Director General de MegaFlux, generar nuestra propia base tecnológica en México es vital. "Por esta razón, estamos desarrollando de la mano del CONAHCYT, centros de investigación del país y la armadora DINA el primer autobús eléctrico mexicano". Un paso preliminar en este proyecto fue la instalación del tren motriz eléctrico pesado de MegaFlux en un autobús existente de la flota de RTP para darle una "nueva vida eléctrica", con recursos de investigación y desarrollo del Gobierno de la Ciudad de México.
Para Gustavo Jiménez, experto en electromovilidad y Director de la consultora e-Mobilitas, el concepto de remanufactura eléctrica de MegaFluxpermite una adopción más asequible de la electromovilidad y una aplicación concreta de la economía circular.
Jiménez enfatiza en la pertinencia de la electromovilidad para el transporte público por su alta participación modal, la mejora en la calidad del aire, la mejora en la calidad del servicio y un menor costo energético que puede coadyuvar a mayor estabilidad en las finanzas de los sistemas de transporte.
Para Roberto Gottfried, el EVERHAUL es autofinanciable. “Si traemos a valor presente el gasto de combustible de 5 a 7 años, la remanufactura se paga sola”. Lo anterior resulta atractivo para sistemas de transporte de tamaño mediano que no tienen el presupuesto de las grandes ciudades.
“Lo normal es que los proyectos de autobuses eléctricos se planeen para 15 años. Con el EVERHAUL estamos trayendo este repago a la mitad del tiempo. MegaFlux no está inventando la rueda pero sí ha desarrollado el concepto con tecnología mexicana”, complementa Gottfried. En efecto, la remanufactura eléctrica de vehículos comerciales se aplica hoy con éxito en Francia, California, Reino Unido, Alemania e India.
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En palabras de Felipe Gallego, COO y Cofundador de la compañía, la adaptación del tren motriz eléctrico patentado de MegaFlux fue el desafío de ingeniería más importante. Es necesario analizar la distribución del peso y estudiar cómo mantener la capacidad de las unidades al instalar los sistemas utilizados en la electrificación: desde el motor hasta el paquete de baterías, incluyendo el sistema de distribución de potencia y el controlador de motor.
- Se puede aplicar el tren motriz en autobuses de diferentes tamaños y capacidades.
- Hay flexibilidad en la autonomía requerida para las unidades.
- Los vehículos se pueden adaptar en función de las necesidades.
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Sistema de distribución de potencia: Recibe la energía del paquete de baterías para hacerla llegar al motor y los accesorios.
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Controlador de motor: Dispositivo encargado de mover el motor, convierte la corriente directa en corriente alterna trifásica para proporcionar torque (en el autobús desarrollado el torque es mayor que el de los camiones en los que MegaFlux trabajó previamente).
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Componentes de alimentación de 24 voltios para accesorios: Llevan energía a los ventiladores, luces, luz de cabina y otros dispositivos mediante un sistema conocido como “sistema DC-DC”, que baja el voltaje de la batería de 600 voltios a 24 voltios.
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Sistema neumático: Un compresor eléctrico que entrega aire a presión a los tanques de almacenamiento utilizados para el sistema de frenos del vehículo.
La integración de los componentes, explica Gallego, se hizo pensando en las posibles reparaciones necesarias. El motor fue instalado en la parte trasera del autobús de 12 metros convertido, un Dina Linner 12 de motor a diesel.
El éxito en el proyecto, más allá de demostrar la capacidad para ofrecer unidades eléctricas e integrarlas en la flota de transporte urbano existente, deja claro que la conversión se puede realizar utilizando tecnología mexicana y que no es necesario adquirir autobuses nuevos a un precio mayor para contar con flotillas eléctricas.
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Una alternativa flexible y adaptada con precisión
Gallego añade que la electrificación del transporte público no es homogénea, porque un vehículo que opera en ciudades con clima cálido es distinto a uno que opera en la Ciudad de México. La alternativa de conversión desarrollada por la empresa brinda flexibilidad porque existe la opción de adaptar las unidades a las condiciones específicas de cada región, garantizando el funcionamiento apropiado.
- Se puede aplicar el tren motriz en autobuses de diferentes tamaños y capacidades.
- Hay flexibilidad en la autonomía requerida para las unidades.
- Los vehículos se pueden adaptar en función de las necesidades.
Desde el punto de vista de e-Mobilitas, Jiménez explica que, aunque México ha crecido en el área de la electromovilidad, faltan muchos avances. “Hoy operan en Mexico unos 260 autobuses eléctricos a baterías, pero falta llegar a más. Hay muchas ciudades que no tienen autobuses eléctricos y muchos ciudadanos que todavía no ven los beneficios de tener transporte de calidad, limpio, sin ruido y eficiente”, detalla.
Agrega que MegaFlux funciona como punta de lanza porque con la conversión atiende un tema crítico para la tecnología, al mejorar buses antiguos para que sean cero emisiones.
La solución EVERhaul ofrece una respuesta a la necesidad de transformación del transporte público en México para brindar a los usuarios mejores condiciones de servicio y es un área en la que MegaFlux brinda una alternativa probada. Ponte en contacto si tu empresa necesita ayuda para implementar la electrificación de cualquier tipo de transporte en sus actividades.
(1) “Gasto familiar en servicios públicos básicos (electricidad residencial y agua), transporte y desarrollo sostenible en México: un análisis con microdatos”