MegaFlux es seleccionada por el CONAHCYT para electrificar el transporte público
MegaFlux ha sido seleccionado por el CONAHCYT como asociado tecnológico para el desarrollo del primer autobús eléctrico mexicano para transporte público. La tecnología motriz, que incluye el motor eléctrico de manufactura MegaFlux, el paquete de baterías y la electrónica de potencia, será integrado por MegaFlux.
El proyecto parte del mandato del Consejo de impulsar la independencia tecnológica de México, en el contexto del desarrollo de la cadena del valor del litio, mineral indispensable en las baterías para vehículos eléctricos.
La selección de MegaFlux se sustenta en su calidad de único fabricante mexicano de trenes motrices eléctricos para vehículos eléctricos. “MegaFlux lleva desarrollando tecnología durante los últimos 11 años. Este reconocimiento del CONAHCYT a MegaFlux nos permitirá incursionar en el mercado de autobuses eléctricos que hoy solo incluye autobuses importados y a la vez atender el modo de transporte que mueve a 1 de cada 3 mexicanos”, explica Roberto Gottfried, Director General de MegaFlux.
El proyecto implica una colaboración “triple hélice”, es decir, implica la colaboración de gobierno, academia e industria. Los demás participantes del proyecto incluyen el CIATEQ, la Universidad Autónoma Metropolitana y la armadora de autobuses DINA.
“El apoyo gubernamental en México ha sido estratégico en el desarrollo de nuestra tecnología y permite aumentar el contenido nacional de forma sustancial”, argumenta Felipe Gallego, Director de Operaciones de MegaFlux.
En efecto, un autobús importado hoy solo contribuye el IVA en materia de ingresos para el país. El resultado del proyecto corresponderá a la producción de la primera unidad, misma que tendrá 78% de contenido nacional.
“La introducción de este autobús en 2024 será importante para potenciar el mercado interno de autobuses eléctricos a precios más competitivos y mayor generación de valor para el país, pues la exención de aranceles para unidades importadas expira también el próximo año”, enfatiza Gottfried.
“Estamos en un nuevo contexto internacional donde los países están direccionando su política industrial para estimular su propia tecnología y disminuir dependencias y vulnerabilidades en su cadena de suministro”, complementa Gottfried.
El trabajo de MegaFlux en autobuses no empieza de cero, pues la empresa se prepara para entregar la primera unidad remanufacturada de propulsión eléctrica para la Red de Transporte de Pasajeros (RTP) de la Ciudad de México.
“En este proyecto para RTP, con apoyo de la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la CDMX, tomamos un autobús de su flota actual y la transformamos en eléctrica, dándole 10 años más de vida y aprovechando unidades que aún son funcionales”, ilustra Gallego.
La nueva unidad MegaFlux del proyecto del CONAHCYT tendrá 9.5 m de longitud, capacidad para 80 pasajeros, en configuración de entrada baja para óptima accesibilidad y una autonomía de más de 300 km. Esta configuración permitirá una fácil operación en la mayoría de ciudades del país, donde existen más de 90 con al menos 100,000 habitantes.
“El reto de la movilidad no solo está en las grandes metrópolis de México, sino en las ciudades medianas que son las que crecen más rápidamente y donde puede actuarse a tiempo para estructurar la movilidad alrededor de un transporte público de alta calidad”, describe Jorge A. Suárez, Director Comercial de MegaFlux. “Nuestra meta en consolidar a MegaFlux como un jugador importante en el mercado de autobuses eléctricos, replicando nuestros aprendizajes del mercado de camiones eléctricos de distribución urbana”.
El mercado de autobuses eléctricos en México es aún pequeño, con unas 216 unidades en operación o adjudicadas en Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, pero presenta el mayor potencial de crecimiento en la región de América Latina dentro de un solo país. MegaFlux estima que para 2030, este mercado podrá contar con un volumen total de mercado de 2,000 unidades anuales, de los cuales aspira a conquistar una participación importante.
Una vez que el primer autobús esté terminado continuará con recorridos de demostración en un número de ciudades del país, entre ellas Hermosillo, donde se avanza en un clúster industrial y económico alrededor del litio. “Parte del proyecto es el testeo del autobús en diferentes condiciones ambientales y ciclos de operación; lo anterior para la mejora continua y levantar datos de los ciclos de manejo en diferentes ciudades de México, lo cual es clave para dimensionar el tren motriz y la infraestructura de recarga”, explica Gottfried.
El nuevo autobús de MegaFlux será presentado por la empresa a mediados de 2024.
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